A~
Vos, vos estás con el corazón abierto,
Con el corazón en alto,
Y tus palabras son tu escudo y tu casa
Tu vida y tu cansancio, todo,
Todo está hecho de poesía.
Una prosa inmortal, grabada en tu pecho y el aliento
de años que nadie vio.
Tu sentido ilimitado de justicia, tu cabeza dicta,
Y no existe nada absoluto, pero tu justicia es lo mas idónea que me pueda imaginar.
Me hace mal ver cómo denigran las letras
Porque me hace mal verte sufrir por eso.
Pocas veces alguien ve las cosas donde los otros las ignoran.
Pocas veces no puedo leer en tu mano, lo que en mi cabeza recién está saliendo.
Quizá puedas llorar en un momento, un ciclo de eternidades que no coinciden con el tiempo que vivís creando, y llorando, una constelación se desarma en tus manos y el cielo te da la pauta de seguir subiendo. Pasan siglos antes que puedas razonarlo, y con tu mano arriba, se te destroza la imaginación, y un relámpago borra lo poco de concentración que quedaba.
Una noche el cielo se decide a caer mas cerca, casi dejándose tocar por todos nosotros, únicamente para probar que es tan alcanzable cómo cualquier hoja en cualquier árbol. Y sangra, para mostrar que quizá es un poco humano, cómo todo lo que está encerrado en este mundo, plenamente humano, quizá en su totalidad.
Eras una bandera, eras un símbolo, un Fabergé sobre una repisa de concreto, ahí, sin ningún tipo de uso. Ahora sos una estrella, estás iluminando caminos y vos seguís pensando que tu único sentido es existir.
What kind of lips are these
That lied with every kiss
That whispered empty words of love
that left me alone like this
Etiquetas: cosas de las que vale la pena acordarse
Dibujás líneas en el cristal empañado, dibujás siluetas, mientras llevás de a poco una sonrisa a tus labios, y lo peor, no tenés porqué hacerlo. Líneas o dibujos, nunca voy a saber qué es eso. Una vez escuché algo, como que la felicidad no es para todos. Gran error! Me parece totalmente idiota el pensamiento cuando se asemeja a eso. Estás sonriendo, feliz, seguís marcando como a fuego esa ventana, ponés transparente el vidrio cuando va pasando la punta del índice…
Y me pregunto qué te hizo el mundo, para que te sientas con el derecho a enfermarte, y arrastrar a todos esos sueños que una vez pasaron por tu cabeza, e implosionaron dejando miles de pedacitos, residuos que siguen manchando las ventanas que alguna vez tuviste. El mundo se te regalo, naciste arriba del resto, y? De un golpe se termina tu mundo burbuja, y me querés teñir el alma de tristeza. ‘Somos sobras’ me decís, sobras del mundo, y no actuamos como nos gusta, porque está mal. Te abrazaría, pero tengo miedo de helarme, de quemarme. Y espero, pero el cielo no calma, y vos seguís dibujando religiones, sueños, cuentos que nada más en tu cabeza podrían seguir viviendo.
Sigo sentado viéndote y seguís ahí con tu mano alzada, como si estuvieras dedicándote a crear vida. Ya nadie sigue leyendo, suplicar no es de cobardes, es de pobres esperanzados. No justificarse, tengo que acordarme… Y los pedazos de madera del marco siguen cayéndose. Ahora entiendo cómo el vidrio se deja moldear así. Son cristales color vida, teñidos con un suspiro, y un sueño de una noche de primavera que me dice que cierre los ojos.